viernes, 25 de julio de 2008

Salida 24 de julio.

Después de algunos días de viento en los que por suerte he estado fuera, me decidí a salir por Camposoto a practicar un poco de pesca fondeado, que hacía tiempo que no hacía esta modalidad. 6:30 am despierto con la incertidumbre de si habrá viento o no. Asomo la nariz al patio y efectivamente no hay. Inmediatamente me tomo la biodramina y preparo un bocata y bebidas para llevar y tomar a media mañana. Llego a la playa y en el aparcamiento mis oídos perciben los truenos que provienen de la orilla, unas olas con un tamaño curioso y que casi no daban tregua. A las 7:15 am estoy en el agua y aprovechando un hueco entre algunas olas entro rápido y veloz, aún así me como un par de ellas en el pecho pero la prowler navega de lujo y se porta bien manteniendo el rumbo. Cuando paso la línea de olas y las boyas de señalización de la playa empieza a dar el mar de fondo, con unas olas que me hacían desaparecer arriba y abajo. Pongo rumbo al pesquero y una vez llego me fondeo con la ilusión de pescar algo. Rápidamente llegan las primeras picadas y aparecen mojarras negras de un tamaño medio pero no el deseado, hago suelta de algunas que no vienen tragadas, otras no puedo hacer nada. Entre tanto aparece el mareo, la mar de leva empieza a hacer de las suyas y comienzo a echar hasta la primera papilla. Es curioso pero todo desaparece cuando vienen las picadas gordas. A las 10:30 am el pescado deja de comer y me dispongo a dar un paseo a curri más a la orilla, me entran una oblada y un cochino que traía a toda la corte detrás acompañándolo, este lo suelto. El resultado de las tres horas de pesca. Borriquete con 980 gramos y otro con 530, sargo burgo con 800 gramos y alguna pieza más no destacable.


miércoles, 16 de julio de 2008

El dia del mero.

Hoy ha sido un dia especial. Fuí a salir por Sotogrande y entré en el agua sobre las 16:30. No tenía ninguna marca en especial, así que me dediqué a investigar por la zona. Logré dar con una piedra, que aunque no muy grande, tenía muy buena pinta. La marqué en el gps y empecé a trabajarla con el jig. Solo tuve que bajarlo tres veces, la suerte estuvo de mi parte y a la cuarta tuve una gran picada. La caña se dobló como nunca antes lo había hecho, noté algunos cabezazos bastante grandes y luego un peso muerto muy pesado, como si de una piedra se tratara. Bombeando con la caña poco a poco fuí recogiendo linea y en algunos minutos tuve un subidón de adrenalina cuando ví un mero bajo mi kayak. Venía dando vueltas panza arriba, el cambio de presión llenó su vejiga natatoria de aire. Pude subirlo a bordo y ví lo bonito que era, el color marrón y las motas amarillas daban una nota de color precioso. Estaba muy nervioso, no sabía que hacer, si salir del agua, permanecer allí y volver a jigear.... Al final me decanté por lo primero y cuando llegué a la orilla mi mujer me esperaba asombrada por la gran captura que hice. Según tengo entendido, los meros a jigging son capturas muy interesantes, y yo, con mi kayak, he tenido la suerte de poder hacerme con uno.

Un saludo.


viernes, 11 de julio de 2008

Salida 10 de julio



Hoy salí un rato por la tarde en Cádiz, el mar estaba regular. Fuí primero a una marca cercana donde no hubo suerte, y saliendo de ella hacia otra, ví un poco de actividad en el fondo, dejé caer el jig y en breve tuve una picada pequeña, subiendo a bordo una breca mediana. Volví a lanzar algunas veces pero ninguna picada más.
En la segunda marca, después de una hora más o menos bailando arriba y abajo el jig, tuve otra picada, esta vez con algo más de tensión en la linea. Pude hacerme con una sama pluma de 1,100kg. Después de esta volví a tierrra poco a poco, el viento azotaba y ya tenía el hombro bastante tocado de mover los diferentes jigs. Un saludo.