domingo, 15 de junio de 2008

Salida 14 de junio.

De nuevo, me decidí a salir por Cádiz a ver que se presentaba por la zona. A las 7,30 ya estaba en el agua. Yendo hacia la marca preparé la caña de currican, con una rapala de profundidad y dos plumitas arriba. Se veía actividad y había caballas arriba del agua ariscando, el mar estaba hecho un plato e invitaba a navegar, todo un gustazo. Una palada tras otra cuando de repente rrrrrrrrrrrrrrrrrr!!! El carrete comienza a chirriar como si hubiera enganchado la rapala en el fondo. Comienzo a recoger y avanzo con el kayak hacia la muestra y, en breve, comienza a soltar carrete de nuevo, una y otra vez, parece algo grande, con mucho nervio. Veo como la linea corre por la superficie de un lado a otro, una pasada. Poco a poco logro cobrar linea y cuando lo tengo debajo del kayak veo debajo una preciosa bacoreta dando vueltas y con cuidado la voy acercando para subirla con el bichero. Pesó 2,800kg.
Las bacoretas son muy voraces y buenas capturas en lo que al combate se refiere, tienen mucha potencia de nado y su picada aporta una diversión asegurada.
A lo largo del dia pude capturar algunas caballas y jurelas aparte de la bacoreta. Haciendo balance he tenido una buena jornada.

lunes, 2 de junio de 2008

Salida 1 de junio.

Después de algúnas semanas sin salir a causa del mal tiempo, y ya con un mono de los grandes, por fín pude planear una salida. Esta vez me decidí a salir por Cádiz. A las 7:15 estaba ya en el sitio preparando los bártulos de pesca, pasaron unos 20 minutos cuando me adentré en el mar y comenzé a remar para llegar a la marca. La sonda marcaba actividad, seguramente serían caballas ya que es la época. Una vez en la piedra empiezo a menear el jig arriba y abajo, pronto comienzan las caballas y jurelas a entrar, comienza la diversión. Algunos dobletes entran a las plumitas de arriba del jig, que nerviosismo traen las caballas, tiemblan de una forma bestial. Es de las primeras veces que el jigging comienza a hacer efecto y aunque es una pesca un poco estresante, si es verdad que es distraida. El estar esperando la picada "gorda" en uno de los tirones hace estar al 100% atento y en tensión.
Muchas pasadas tuve que dar en la piedra para subir las caballas, pero al final....zassss!!! Iba subiendo una caballa cuando de repente un tirón me hunde la caña, el carrete empieza a chirriar y comienza el combate. Es una pasada como tira el bicho, es mi primera pieza grande y la adrenalina que tengo encima no es poca. Me cuesta bastante, pega unos cabezazos buscando el fondo pero poco a poco voy cobrando linea. A los 5 minutos más o menos ya le veo el lomo brillar y voy preparando el bichero como puedo para embarcarlo a bordo. Cuando lo tengo en mis manos no puedo estar más nervioso, no sé si meterlo en la bolsa, si ponerle el pasador, si amarrarlo por la cola, ufff... Tiene una boca poderosa, pega unos mordiscos que hay que tener sumo cuidado. Poco a poco me tranquilizo y ya decido tirar para tierra donde, después de sortear algunas olas, logro entrar en la orilla. Al final escapo con una sama de 3,500kg y 3,700kg de caballas. Un día de los que no se olvidan sin duda alguna.