Mejorando

Hola amigos, por fin el tiempo ha dado un poco de tregua estos días, y es que, cada vez que llega el fin de semana, o viento o lluvia (menos veces), desde hace ya algunos meses.

La jornada se presentaba muy buena, mucha actividad, poco oleaje y escasez de viento. Puntos clave para disfrutar de un buen día de pesca en kayak. Llegué muy temprano, para ir con tiempo y tranquilidad, cuando salí del coche y empecé a preparar el kayak me di cuenta de que la previsión volvió a equivocarse.

Empezó a soplar viento de noroeste, algo más fuerte de lo que en un principio daban el día anterior. Pero hoy me llevé la boya de fondeo, para asegurar que, en el caso de no poder pescar a jigging o vivo, pudiera fondearme tranquilo.

Entré en el agua y el viento me ayudó bastante a llegar a la zona elegida, navegando en algunos momentos a 5 nudos. Lógicamente, cuando llegué, la deriva era demasiado rápida para la técnica elegida. Aún así, bajé al fondo una pieza de tal forma que ella fuera a su bola sin tensión alguna, así, viendo yo por donde iba, la iba siguiendo con suaves paladas, eliminando así gran parte de la deriva. Al poco llegó Reymon, así que estuvimos batallando por la zona.

Pero hoy los grandes no estaban por la labor, así que antes de fondearme, cambié a jigging con rubbers y vinilos, sin suerte alguna, excluyendo una chova pequeña que por allí nadaba.

Llegó la hora de fondearme. Reymon se quedó derivando por la zona y yo me retiré a mis aposentos.Ya hacía mucho tiempo que no practicaba esta modalidad, pero siempre la tengo en mente cuando me hago desplazamientos de unas marcas a otras, observando fondos y anotando posibles zonas calientes. Llegando a una que semanas atrás pude anotar, observé un fondo mixto que parecía interesante, y allí me quedé.

Las primera captura no me dio muy buena esperanza, una cabrilla como las malagueñas tan famosas en los campeonatos, donde se ven toneladas de ellas, pero pronto empezaron a entrar mojarras. La mayoría de ellas fueron al agua, debido a su escaso tamaño, intento estar cada vez más selectivo. Al poco bajó el viento y se quedó un día espléndido.

En una de las bajadas y viendo movimiento en la sonda pude hacerme con alguna breca de buen porte, pensando que había entrado un bolo de estas, pero mi idea se quedó muy lejos de la realidad.

La captura del día fue un sargo que me alegró la jornada, de algo más de un kilo, para mí un record personal, me alegré mucho, pensé que sería una vieja o parguetón ya que lo vi en alguna carrera cerca de la superficie, pero me equivoqué. Me hizo mucha ilusión verlo tras la línea. Exquisito en la mesa.

Al poco terminó la actividad y dejaron de entrar las piezas, así que viendo que la hora se echaba encima decidí volver a tierra. Monté una señuelo de superficie con sendos pepones de Kurrican, que sucumbieron a una buena oblada devuelta a su medio.

Y bueno, así quedó la cosa, un día divertido de pesca como casi todos en los que se fondea uno, donde casi siempre, se asegura alguna captura.

Saludos a todos.

"Raspacejo"