domingo, 22 de marzo de 2020

TEST HOBIE REVOLUTION 13

Hola amigos, por aquí os dejo otra prueba de Hobie Kayaks, en esta ocasión,  la review del Revolution 13, un  kayak muy simbólico de la marca y que ha dado muchas alegrías a pescadores. Todo ello posible gracias a Peskayak, distribuidor oficial de la marca para España.
En todos los modelos vistos hasta ahora, siempre os he comentado el tema de la proa y su falta de altura, pero en esta ocasión he de decir que  al ser un casco de  la saga Revolution este no es su mayor problema. Nada más montarte encima te das cuenta de lo bien que navega esa proa más alta y afilada.


Por contra también en la primera montada ves que el Revolution 13 es un kayak exigente en cuanto estabilidad y que no te permite hacer muchas filigranas o movimientos extraños cuando vas encima.
La impresión general ha sido bastante buena exceptuando que le falta material de serie como guías de rail para soportes de cañeros, sonda o cámara los cuales habrá que instalar agujereando el mismo casco o instalando dichos raíles.
Un kayak de este nivel como mínimo debería de traer un par de raíles en ambas bandas ya que hablamos de precios bastante altos. 
El asa que trae en  proa es la clásica de Hobie y también va anclada al casco con el puente de acero  inoxidable.


Justo tras ella tenemos el tambucho que en esta ocasión no es como el modelo outback convexo sino que es cóncavo con lo cual no se queda nada de agua estancada. En el Revolution 13 también tenemos el hueco para alojar el mástil de la pequeña vela que tiene Hobie al igual que en casi todos sus modelos.


La bañera de este kayak en su parte interior es bastante más estrecha que lo visto hasta ahora, por consiguiente tenemos menos espacio para dejar objetos y movernos con facilidad, digámoslo así, en este aspecto se asemeja más a un kayak de pala tradicional.


La  pedalera que trae es el modelo 180 (marcha delante/atrás) en la versión a ARC pero como véis esta unidad al ser algo más antigua viene con las bielas normales. Tampoco trae las aletas turbo de serie, sino que viene con las modelo ST, En esta unidad teníamos incluido opcionalmente tanto las aletas turbo como el timón sobredimensionado.


También dispone de la goma con el gancho para bloquear la pedalera una vez tengamos las bielas colocadas una delante y la otra atrás. Y si os dais cuenta, en la bañera de la pedalera no tiene autovaciables,  sólamente el hueco de la pedalera hace esta función.



El tambucho central es de tamaño 8 pulgadas en redondo y la verdad es que se nota el poco espacio en este hueco teniendo que tirar de elementos como cajas estancas y demás para guardar el material de pesca.


El Revolution 13 dispone de dos asas laterales con un tacto bastante blandito, que nos ayudaran en el transporte del casco en tierra. Éste kayak solamente dispone de mando de timón en la banda izquierda, con lo cual tendremos menos facilidad de maniobra en acción de pesca.


En ambas bandas disponemos interiormente de dos rejillas para colocar elementos pequeños, tipo alicates, guantes, grips o similares de tamaño reducido. Estas rejillas ayudan a que no se salgan los elementos del hueco preformado en el casco.


Dentro de estas rejillas tenemos los pasacables que trae de serie para la instalación de los equipos electrónicos. Unos elementos muy útiles para no tener que hacer agujero ninguno en el kayak.


En el Revolution 13, el asiento que nos encontramos es el Vangate CT. Un asiento de bastante calidad y que nos permitirá estar muchas horas en el agua cómodamente. Tiene múltiples regulaciones, tanto en altura como respaldo y ajuste lumbar mediante un cierre tipo "BOA", bastante preciso y que nos ayudara a regular esa zona lumbar tan castigada.


A su vez, el asiento, tiene unas patas plegables que podríamos usar para ponerlo en tierra y sentarnos a modo de silla de playa. Justo detrás tiene un cierre tipo click, para fijarlo al casco y, en caso de vuelco, no se salga de su sitio.
Una cosa que notado es que al sentarte en la parte delantera del mismo para acceder a cosas por delante de la pedalera el asiento se baja de la parte de atrás y es bastante molesto. En el video podréis ver a que me refiero. Por otro lado, es algo complejo la colocación del asiento en su parte delantera las primeras veces que lo usas, una vez se le coge el truco nos habituamos a esta colocación.


Durante todo el tiempo que le di uso, el asiento estuvo en la posición más alta, para así ver y comparar estabilidad con otros modelos de la marca. Si bien es cierto que no llega a tener la estabilidad de un Outback, os puedo decir que el kayak no es peligroso como en alguna ocasión he oido a algún compañero. Tiene una estabilidad bastante aceptable teniendo en cuenta de que lo llevaba en la posición más alta, todo es acostumbrarse, incluso, si en algún momento estamos decididos por esta montura, siempre podemos añadirle los estabilizadores de Hobie, que son bastante ligeros y poco voluminosos (yo no los veo necesarios).


Al contrario que en la mayoría de los kayaks, el Revolution 13 trae un sistema peculiar de desagüe bajo la zona del asiento. Nada que ver con lo visto hasta ahora. Se trata de un tapón autovaciable que se activa con un tirador, para, en caso de necesidad por acumulación de agua, tiramos y mientras se navega, el sistema elimina el agua almacenada en esta zona a través de una válvula bajo el casco. Lo veo bastante complejo dado que hay que estar pendiente de cuando tenemos agua o no, así que yo siempre lo llevaba en modo abierto para que no acumulara agua. El francobordo del Revolution 13 no es muy alto, y si navegas con las manos colocadas en las asas notarás que siempre hay salpiqueo hacia dentro del casco, por eso, a mi modo de ver, yo pondría dos autovaciables normales como en todos los kayaks de la marca.





La bañera del Revolution 13 es de un tamaño suficiente para cargar los elementos tradicionales que siempre llevamos, tales como cajas tipo H-CRATE, pequeñas neveras o viveros. No es muy ancho, pero sí largo.
En ambos lados tenemos los cañeros preformados en el casco (popa), no muy profundos y sin cruceta en el fondo. Traen sus tapones, que la verdad no me terminan de convencer, puesto que sirven de bien poco, más que nada para entorpecer la salida y entrada de los talones de las cañas. Aconsejable o, quitarlos desde un primer momento, (sólo es quitar un tornillo y ponerlo de nuevo ) o dejarlos abiertos en tierra, ya que en el agua se te puede complicar la maniobra de girarte para atrás y estar pendiente de estos tapones.


La bañera tiene unos railes preformados en el casco para que el agua vaya directamente a los autovaciables de la misma, y así no acumule agua en la parte trasera.
A su vez, trae las clásicas gomas de porteo que se quitan fácilmente, con dos ganchos en la parte más a proa. 
El tambucho de popa es bastante generoso, tamaño 8 pulgadas y en la tapa viene con un "pin" de repuesto para el timón. Es bastante estanco y no deja traspasar agua al interior del casco.


El asa de popa es igual a la de proa, sencilla pero con un tacto muy bueno.


Y llegamos al timón. Esta unidad de Revolution 13 disponía de un kit de timón sobredimensionado y aletas turbo, con lo cual, en cuanto a maniobrabilidad, se ganaba bastante, pero ni aún así, se asemejaba al tipo de timón de la serie Outback/Compas/Proangler, que les da muchísima más maniobrabilidad. Esto es debido a la fabricación del casco, que en este no habría forma de poner un timón de los otros tipos.



Justo delante de las rejillas delanteras, disponemos de los mandos de subida y bajada del timón. En la derecha lo bajamos y en la izquierda lo subimos.
Hay que tener en cuenta que al bajarlo, lo ideal es colocar el cabo del tirador en la mordaza que trae bajo la rejilla derecha, para así evitar que el timón se suba al navegar, pero muy IMPORTANTE es que, cuando lleguemos a tierra, quitarlo de la mordaza, ya que si pega en el fondo, seguramente puedas dañar el sistema del timón, aunque por seguridad, por eso trae el pin que os comenté antes, que supuestamente (debido a su material) se debe de romper antes para asegurar no romper el casco por la popa.



El timón tiene una goma elástica para fijarlo al casco cuando lo transportemos, es importante retirar dicha goma antes de echarnos al agua, ya que si no, tendríamos que hacer una maniobra extraña con la pala para retirarlo una vez en el mar. No es difícil, pero hay que hacerlo sin riesgos.


Los dos únicos autovaciables "normales" que trae el Revolution 13, los trae protegidos con el casquillo roscado, así que en ese aspecto no tendremos problemas para usar el carro que va introducido en los mismos, una de las mejoras muy de agradecer por parte de la marca en la mayoría de sus modelos.
Bajo el casco, tenemos el hueco para el transductor de nuestra sonda, denominado Lowrance Ready y que principalmente está pensado para esta marca aunque se puede usar para cualquier otra. La ventaja que tiene este sistema es que se le puede montar y desmontar un equipo en 5-10 minutos muy fácilmente y con apenas herramientas (llave inglesa y destornillador).





Las impresiones fueron bastante buenas, un kayak muy marinero, robusto y de mucha calidad, aunque un poco encasillado en el tiempo y que seguramente en breve tendrá algún restyling. Destacamos su velocidad, en torno a 3,5 nudos sin problemas, su buena altura de proa y su comodidad. Echamos en falta algo de estabilidad,  espacio en bañera y ausencia de railes para instalar accesorios. Por lo demás, una montura excepcional.

Y bueno compañeros, espero haber contribuido a vuestra distracción unos minutos, en estos momentos tan complicados por los que pasa el mundo ahora mismo. Como siempre, os dejo el vídeo por aquí abajo para completar el test. Como siempre, gracias a Peskayak y a Hobie Kayaks por su interés en mi opinión sobre estos modelos.
Un saludo a todos.
"Raspacejo"



















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